Soy admitido por la naturaleza en el más secreto de sus divinos recintos, en el punto de partida de la vida universal; ahí sorprendo la causa del movimiento y escucho el primer canto de los seres en toda su frescura.3 En ese vasto silencio acorazado de gritos de guerra, oculto https://chancejfbvo.dailyblogzz.com/28666502/the-viera-vidente-diaries